¡ESCÁNDALO EN LA POLÍTICA INTERNACIONAL! Congresistas de Estados Unidos han lanzado un duro mensaje a Gustavo Petro, presidente de Colombia, acusándolo de ser cómplice del controvertido juez brasileño Alexandre de Moraes, sancionado por Washington por violaciones a los derechos humanos. En un giro inesperado, Petro ha respondido exigiendo una demanda contra el gobierno estadounidense, argumentando que sus acciones violan la Convención Americana sobre Derechos Humanos. Pero esta defensa ha encontrado resistencia en el Congreso estadounidense, donde figuras como María Elvira Salazar y Carlos Jiménez han comparado a Petro con líderes autoritarios como Nicolás Maduro y Miguel Díaz-Canel.
El Departamento del Tesoro de EE. UU. impuso sanciones a Moraes, lo que desató una ola de críticas hacia Petro. La congresista Salazar no se contuvo y acusó al presidente colombiano de normalizar los abusos del juez brasileño, afirmando que su postura lo convierte en cómplice de quienes vulneran derechos fundamentales. “Petro no protege los derechos humanos, es un aliado de quienes los violan”, sentenció Salazar.
Mientras tanto, el congresista Jiménez anticipó un cambio político en Colombia, prediciendo que el progresismo perderá terreno en las elecciones de 2026. “El pueblo colombiano no se someterá”, advirtió, reflejando la creciente polarización en la política latinoamericana.
Por otro lado, la crítica a la intervención estadounidense también surgió de sectores colombianos, como Juan Camilo Restrepo, quien cuestionó la injerencia de EE. UU. en asuntos judiciales ajenos, argumentando que erosiona la soberanía de los países.
Este escándalo no solo pone en jaque las relaciones diplomáticas entre Colombia y Estados Unidos, sino que también reaviva el debate sobre la intervención extranjera en la política interna de los países latinoamericanos. La tensión está en aumento y el futuro de la política colombiana podría estar en juego. ¡Estén atentos a más desarrollos de esta explosiva situación!