A sus 44 años, Salvador Cabañas rompió su silencio y conmocionó al mundo. En un impactante relato, el exfutbolista paraguayo, conocido por su brillante carrera, desveló los oscuros secretos que rodean su vida tras el atentado que casi le cuesta la vida en 2010. La balas que atravesaron su cráneo no solo destruyeron su carrera, sino que también revelaron la traición de quienes más amaba.
Cabañas, quien brilló en el Club América y dejó una marca imborrable en el fútbol sudamericano, fue víctima de un ataque brutal en un club nocturno de Ciudad de México. Mientras luchaba por su vida en el hospital, su esposa, María Alonso, y su agente, aprovecharon la situación para despojarlo de todos sus bienes. “La mayor traición no fue el disparo, sino ver cómo quienes amaba me dieron la espalda”, confesó Cabañas, visiblemente afectado.
A pesar de sus esfuerzos por regresar al fútbol, su cuerpo y mente nunca volvieron a ser los mismos. Las lesiones y el trauma emocional lo llevaron a una vida alejada del glamour de los estadios. En lugar de lujosas mansiones, ahora trabaja en la panadería de su familia, enfrentando la dura realidad de haber perdido no solo su carrera, sino también su familia y su fortuna.
“El dolor físico puede sanar, pero las heridas emocionales nunca se irán”, dijo Cabañas entre lágrimas, recordando sus días de gloria. La historia de Salvador Cabañas es un recordatorio desgarrador de cómo la traición puede ser más dolorosa que cualquier herida física. Mientras el mundo del fútbol se conmociona, él sigue adelante, decidido a reconstruir su vida, aunque las sombras del pasado persistan.