La reciente aparición de Shakira en la guacherna de Barranquilla ha desatado una auténtica locura entre sus seguidores y ha creado un nuevo atractivo turístico en la ciudad. Durante el evento, la cantante se presentó disfrazada junto a sus hijos, disfrutando de la festividad como una barranquillera más. Sin embargo, lo que realmente sorprendió a todos fue una simple foto que compartió, en la que aparece sentada en un bordillo, un pequeño muro que separa dos casas.
Desde que la imagen se hizo viral, cientos de fanáticos han acudido al lugar para inmortalizar su visita, algunos incluso usando máscaras similares a la de Shakira. Este fenómeno ha llevado a que el sitio, ahora conocido como “El bordillo de Shakira”, sea catalogado como una atracción turística en Google Maps, acumulando reseñas y fotos de visitantes que buscan sentirse más cerca de la artista.
La dueña de la casa donde se tomó la foto expresó su asombro y alegría al ver cómo su patio se había transformado en un punto de peregrinación. En una entrevista, comentó su deseo de volver a ver a Shakira en su hogar, añadiendo que su visita fue una experiencia maravillosa.
La reacción de Shakira ante este aluvión de atención fue de humor, compartiendo en Twitter su disfrute por el famoso bordillo. Este acontecimiento ha generado un gran entusiasmo en Barranquilla, donde la cantante no solo ha mostrado su aprecio por la cultura local, sino que también ha dejado una huella imborrable al compartir con sus hijos y disfrutar de las tradiciones de su tierra natal.
Tras sus emotivos conciertos en la ciudad, Shakira ha partido hacia Bogotá para ofrecer dos shows como parte de su gira “Las mujeres ya no lloran”, cerrando así su recorrido por Colombia. Se espera que la artista regrese en los próximos meses, ya que aún está pendiente de reagendar su concierto cancelado en Medellín. Sin duda, este fenómeno del “bordillo de Shakira” ha capturado la atención de muchos, convirtiéndose en un símbolo de la conexión entre la artista y su ciudad natal.