**Rusia lanza un ataque devastador contra Kiev, Trump amenaza a Putin y alerta en EEUU**

En un giro alarmante de los acontecimientos, Rusia ha desatado su ataque aéreo más devastador contra Ucrania hasta la fecha, bombardeando Kiev con cerca de 730 drones y una docena de misiles balísticos. Este ataque, que ha dejado al menos dos muertos y 16 heridos, ha sido calificado por el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, como una escalada del terrorismo ruso, con impactos en ocho de las diez regiones de la capital.

Mientras el caos se desata en Ucrania, el expresidente de EE.UU., Donald Trump, ha intensificado su retórica contra Vladimir Putin, afirmando que Rusia está perdiendo la guerra y que el conflicto “nunca debió ocurrir”. Trump, en un giro sorprendente, está dispuesto a apoyar un proyecto de ley que impone sanciones severas a Rusia, pero solo si se le otorga control total sobre la política exterior estadounidense.

La situación se complica aún más con la reunión programada entre el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, y su homólogo ruso, Sergey Lavrov, en el marco de la cumbre de la ASEAN. Este encuentro podría ser crucial en medio de un clima de creciente tensión entre Moscú y Washington.

Las imágenes del ataque ruso muestran edificios destruidos y una respuesta de emergencia que refleja la gravedad de la situación. Zelenski ha denunciado que estos ataques son una clara violación de la soberanía ucraniana y ha instado a la comunidad internacional a actuar con rapidez.

El mundo observa con preocupación mientras las potencias se preparan para una posible escalada en el conflicto. La guerra en Ucrania, que ya lleva más de tres años, se intensifica, y las repercusiones podrían ser devastadoras no solo para la región, sino para la estabilidad global. La pregunta ahora es: ¿cómo responderán los aliados de Ucrania ante esta nueva agresión? La urgencia es palpable y el tiempo es esencial.