**ÉL ODIABA en secreto a John Wayne y la razón te sorprenderá**

En un giro impactante que sacude los cimientos de la mitología del cine estadounidense, se revela que el legendario actor Lee Van Cliff albergaba un profundo desprecio hacia John Wayne, el ícono del heroísmo patriótico. Detrás de la imagen glorificada de Wayne, un hombre que nunca sirvió en el ejército mientras interpretaba papeles de héroe, se encontraba un antagonista silencioso que cuestionaba la esencia misma del mito.

Van Cliff, quien sirvió en la Segunda Guerra Mundial y luchó por su lugar en Hollywood, nunca fue visto como un héroe, sino como el villano de turno, un estereotipo desechable. Mientras Wayne ascendía a la fama con películas que exaltaban el patriotismo, Van Cliff se desvanecía en la oscuridad. Pero la llegada del director Sergio Leone en la década de 1960 cambió el juego. Van Cliff resurgió como un anti-héroe complejo que desmanteló la narrativa simple de Wayne.

El desprecio de Wayne hacia Van Cliff se hizo evidente en una fiesta de Hollywood, donde desestimó a su rival con una mueca despreciativa, llamándolo “solo una cara”. Este insulto resonó profundamente en Van Cliff, quien nunca respondió públicamente, pero su obra habló por él. Sus personajes eran sobrevivientes en un mundo moralmente ambiguo, contrastando con la imagen limpia y recta que Wayne representaba.

Mientras Wayne se aferraba a sus convicciones conservadoras, Van Cliff se convirtió en un símbolo de la complejidad del nuevo Hollywood. La muerte de Wayne en 1979 marcó el fin de una era, pero no todos lloraron su partida. Para muchos, su legado era un recordatorio de los mitos que ya no resonaban. Van Cliff, aunque silencioso en su desapego, dejó una huella indeleble en el cine, revelando verdades incómodas que Wayne nunca se atrevió a enfrentar.

La historia de estos dos titanes del cine no solo es un relato de rivalidad, sino un reflejo de un Hollywood en transformación, donde el héroe y el villano se entrelazan en una conversación eterna sobre la identidad y la verdad. ¿Quién realmente ganó el oeste? La respuesta puede ser más compleja de lo que parece.