**Mercedes Lanza un BOMBAZO sobre Hamilton Tras el GP de China**

En un giro inesperado tras el Gran Premio de China, Mercedes ha dejado caer una bomba que podría cambiar el rumbo de la temporada de Lewis Hamilton. A pesar de haber logrado terminar en los puntos, el fin de semana en Shanghái fue una montaña rusa de emociones para el siete veces campeón del mundo, quien se mostró visiblemente frustrado con el rendimiento de su W15.

Hamilton, que comenzó la carrera en una decepcionante P8, se vio atrapado en una batalla con los coches de la parte trasera, mientras su compañero George Russell luchaba por posiciones en el top 5. Las quejas del británico sobre la velocidad del coche y su balance fueron constantes, llegando a calificar su experiencia como “demasiado lenta”. Este sentimiento de desánimo se intensificó cuando, a pesar de un inicio prometedor en la carrera Sprint, cayó a la P18 durante la sesión de clasificación.

La situación se tornó crítica cuando, gracias a un par de coches de seguridad, Hamilton logró escalar hasta los puntos, pero su desempeño fue eclipsado por la actuación destacada de Russell, quien se aseguró un lugar en los primeros puestos. Un portavoz de Mercedes admitió que el resultado final fue “casi el máximo” dado el rendimiento del coche, pero la realidad es que Hamilton enfrenta una de las temporadas más difíciles de su carrera, con la posibilidad de no conseguir un podio en una carrera completa.

La tensión en el equipo es palpable, y se ha señalado que la relación entre Hamilton y Mercedes podría estar en un punto crítico. En un momento notable, el jefe del equipo, Toto Wolff, se refirió a Hamilton simplemente como “Lewis”, un cambio que podría indicar una creciente distancia entre el piloto y la escudería. Mientras tanto, Russell, quien parece ser el piloto prioritario, busca optimizar su rendimiento mientras Hamilton lucha por entender su complicado coche.

La pregunta que queda es clara: ¿ha comenzado Hamilton a perder la fe en Mercedes? Con el campeonato en juego y la competencia feroz, el futuro de Hamilton en el equipo podría estar en la cuerda floja.