El Palacio de Buckingham emite un aviso: Meghan faltó al respeto a Diana en la Semana de la Moda de París.

El Palacio de Buckingham ha emitido un contundente aviso tras la reciente controversia que involucra a Meghan Markle, duquesa de Sus𝓈ℯ𝓍. Un video que la muestra despreocupada en una limusina, estirando las piernas mientras pasa por el túnel de Pont de l’Alma, ha desatado una ola de indignación y ha llevado a cuestionar su respeto hacia la memoria de la princesa Diana, quien perdió la vida en ese trágico lugar en 1997.

La escena, capturada en sus historias de Instagram, ha sido interpretada como un acto de insensibilidad, avivando el fuego de las críticas tanto en redes sociales como en medios internacionales. Los comentarios han sido implacables: desde acusaciones de falta de respeto hasta llamados a una atención psiquiátrica. La indignación ha escalado rápidamente, con muchos recordando la profunda conexión emocional que el túnel tiene para millones de personas que lloran la pérdida de Diana.

Fuentes cercanas a la familia real revelan que el príncipe William está furioso por la falta de tacto de Meghan. Se dice que ha jurado que, al ascender al trono, tomará medidas drásticas, incluyendo la revocación de títulos y el retorno al apellido de soltera de Meghan, si la situación no se maneja adecuadamente. Este incidente no es solo un desliz social; es un desafío directo al legado de Diana y a la institución misma de la monarquía.

La reacción pública ha sido feroz y polarizada. Mientras los royalistas claman por respeto, otros defensores de Meghan argumentan que la respuesta es exagerada y que su comportamiento ha sido malinterpretado. Sin embargo, la magnitud de la indignación sugiere que este escándalo podría tener repercusiones significativas para Meghan y su relación con la familia real.

Los analistas advierten que este momento podría marcar un punto de inflexión en la percepción pública de Meghan Markle, así como en la dinámica familiar. Las conversaciones tras las puertas cerradas en el palacio son intensas, y se espera que la familia real tome decisiones que podrían redefinir su imagen y su relación con el legado de Diana. La presión es palpable y el mundo está atento a cada movimiento. ¿Cómo responderá Meghan? ¿Qué medidas tomará Buckingham? La historia apenas comienza.