En un giro absolutamente inesperado, el legendario diseñador Bob Mackie, el mismo que vistió a íconos como Cher, Diana Ross y Tina Turner, dejó paralizado al mundo del tenis al anunciar una propuesta que nadie había visto venir:
diseñar personalmente todos los atuendos de Rafael Nadal para sus próximos partidos, con un mensaje poderoso contra la discriminación racial, la desigualdad y los prejuicios en el deporte.

La noticia cayó como un rayo en redes sociales.
Mackie habló con emoción:
“Rafael Nadal es un símbolo de resiliencia, de lucha, de respeto. Él puede transmitir el mensaje que el mundo necesita escuchar.”
Miles de comentarios, millones de likes, titulares globales… El universo deportivo se volcó en felicitaciones y aplausos hacia el tenista español. Nadie podía creer que una figura tan influyente de la moda decidiera unir fuerzas con Nadal para impulsar un movimiento social de esta magnitud.

Pero lo que nadie esperaba era la reacción de Nadal.
En la conferencia privada donde Mackie le hizo la propuesta, Rafa escuchó en silencio, con la cabeza baja… hasta que levantó la mirada, respiró hondo y dijo algo que emocionó tanto al diseñador que terminó llorando frente a todos.

Las fuentes presentes aseguran que la sala quedó en completo silencio antes de que Mackie rompiera en lágrimas y abrazara a Nadal con fuerza. Algunos miembros del equipo no pudieron contener la emoción.
El momento ya se considera uno de los más humanos y poderosos del año en el mundo del deporte y el entretenimiento, una muestra de que la grandeza no solo se ve en la pista… sino también en el corazón.