El fallecimiento de Paquita La del Barrio ha dejado un profundo impacto en el mundo de la música mexicana y sus seguidores. Durante el solemne funeral celebrado en Xalapa, su ciudad natal, su hijo Javier Martínez confirmó la existencia de un testamento, lo que ha suscitado un gran interés sobre su contenido. Aunque los detalles aún no se han revelado, Javier enfatizó que la familia no ha abierto el testamento y que necesitan tiempo para procesar su pérdida antes de abordar temas de herencia.
El funeral atrajo a cientos de admiradores, quienes llevaron margaritas y fotografías de Paquita, recordando su legado musical. Entre los asistentes se encontraban figuras destacadas de la música como Ana Bárbara y Pepe Aguilar, quienes compartieron emociones sobre el impacto que Paquita tuvo en sus vidas y carreras. La ceremonia fue un emotivo homenaje que incluyó canciones interpretadas por mariachis, evocando recuerdos de sus grandes éxitos.
Uno de los aspectos más intrigantes es la especulación sobre la distribución de su fortuna, que se estima en unos 10 millones de dólares. Se habla de que su legado podría incluir partes de su fortuna destinadas a organizaciones benéficas que apoyan a mujeres, dado su activismo por los derechos femeninos a lo largo de su carrera. Además, su casa en Jalapa podría convertirse en un museo en su honor, un destino para sus admiradores.
Javier, quien ha estado a su lado durante sus últimos años, se encuentra ahora en una posición clave para gestionar el legado de su madre. Aseguró que la familia está unida en el respeto por los deseos de Paquita y que no hay conflictos internos sobre la herencia. Mientras tanto, la comunidad musical se pregunta cómo se preservará su legado y quién gestionará sus derechos musicales.
La figura de Paquita La del Barrio trasciende su carrera como cantante; es un símbolo de lucha y resistencia que ha inspirado a generaciones. Su música, cargada de mensajes de empoderamiento, seguirá resonando en el corazón de sus seguidores.