¡ÚLTIMA HORA! La tragedia que ha conmocionado a toda una nación se intensifica tras la revelación impactante de Sulinka Pérez, hija del legendario merenguero Raby Pérez, quien rompió su silencio para compartir detalles desgarradores sobre la muerte de su padre. La escena de su último adiós en el Teatro Nacional Eduardo Brito fue un verdadero homenaje a un artista que dejó una huella imborrable en la música latina. Sulinka, con voz temblorosa y lágrimas en los ojos, alzó su canto no solo como una despedida, sino como un grito de justicia que resuena en el corazón del país.
El colapso del local Jetset, donde ocurrió la tragedia, ha sido objeto de intensas especulaciones. ¿Fue realmente un accidente o hay algo más oscuro detrás? Las palabras de Ana Pérez, la menor de las hijas, retumbaron al decir: “Esto no fue un accidente”, justo en el funeral de su padre, intensificando la búsqueda de respuestas. Raby, en sus últimos momentos, se convirtió en un héroe, utilizando su voz para guiar a los rescatistas mientras el caos lo rodeaba.
La muerte de Raby Pérez no solo se siente como una pérdida personal; ha evidenciado una cadena de negligencias y corrupción en la industria, donde los permisos fueron aprobados sin considerar la seguridad. Familias enteras fueron destrozadas, y con ellas, la esperanza de una justicia que aún parece lejana. Las hijas de Raby han decidido no dejar que su legado muera en el silencio. Han levantado sus voces, convirtiendo su dolor en un movimiento por la verdad y la seguridad, exigiendo que se haga justicia.
La conmoción no solo se siente en las calles, sino también en el escenario, donde Sulinka y sus hermanas continúan luchando para que el legado de su padre permanezca vivo. La historia de Raby es un llamado urgente a la acción. ¿Qué pasará con los responsables de esta tragedia? La lucha apenas comienza, y el eco de su voz sigue resonando, desafiando a todos a no olvidar.