En un giro devastador, Enrique Guzmán, uno de los íconos más emblemáticos del rock en español, ha fallecido a los 80 años. La noticia, confirmada por su hijo entre lágrimas, ha dejado a millones de fans en estado de shock. Guzmán, conocido por su energía arrolladora y su influencia en la música latina, partió en medio de una vida marcada por el éxito y la controversia.
La muerte de Guzmán se produjo tras un grave incidente de salud, donde sufrió un derrame cerebral. Su hijo, visiblemente afectado, compartió que recibió la llamada que lo alertaba sobre la situación crítica de su padre, un momento que lo llevó a correr al hospital, dejando atrás cualquier rencor acumulado en su complicada relación. “No sé si me reconoció, pero ese momento fue desgarrador”, confesó, reflejando la complejidad de su vínculo.
Enrique Guzmán, nacido el 1 de febrero de 1943 en Caracas, Venezuela, fue un pionero del rock en español, conocido por éxitos que marcaron generaciones y por su carisma en el escenario. Sin embargo, su vida personal estuvo llena de controversias, desde acusaciones de abuso hasta problemas con el alcohol, que empañaron su legado. A pesar de sus logros, su figura se vio envuelta en un torbellino de críticas en años recientes, especialmente tras las acusaciones de su nieta, Frida Sofía, lo que complicó aún más su imagen pública.
Su partida no solo cierra un capítulo en la historia de la música latina, sino que también deja un vacío emocional en su familia y en sus seguidores. La complejidad de su legado, que abarca tanto el amor como el desprecio, se convierte en un recordatorio de que la grandeza artística puede coexistir con la controversia humana. La comunidad artística y sus fans ahora enfrentan la difícil tarea de reconciliar su música con su tumultuosa vida personal.