**TRUMP HUMILLADO: MULTITUD EXIGE DEPORTAR A MELANIA Y BARRON TRUMP**
En un giro inesperado que sacude los cimientos de la política estadounidense, Donald Trump se enfrenta a una humillación pública sin precedentes: una creciente multitud exige la deportación de su esposa, Melania Trump, y su hijo, Barron. La indignación se desató tras el lanzamiento de una petición en moveon.org, que ha acumulado más de 45,000 firmas en cuestión de días, pidiendo que la familia Trump no goce de impunidad ante las estrictas políticas migratorias que el propio expresidente ha promovido.
Los críticos apuntan a la hipocresía de Trump, quien ha utilizado el miedo y el odio hacia los inmigrantes como plataforma política durante años. Esta vez, el blanco de la ira no son los inmigrantes de otras naciones, sino su propia familia. La petición argumenta que si Trump busca despojar a los ciudadanos naturalizados de sus derechos, su esposa y su hijo, nacidos bajo circunstancias cuestionables, deben ser los primeros en enfrentar las consecuencias.
Melania, originaria de Eslovenia, llegó a Estados Unidos con un visado de turista en 1996 y obtuvo una controvertida visa EB1, conocida como la “visa Einstein”, que ha sido objeto de críticas por su falta de méritos académicos o profesionales que justifiquen tal privilegio. La indignación aumenta al recordar que Barron, nacido en Estados Unidos, podría ser considerado un “bebé ancla”, un término despectivo que Trump ha utilizado para referirse a los hijos de inmigrantes.
La situación se complica aún más, ya que la interpretación de Trump sobre la 14ª enmienda podría poner en riesgo la ciudadanía de su propio hijo. La ironía de que la misma retórica que ha usado para atacar a millones de familias inmigrantes ahora se vuelva en su contra es palpable y ha desatado una ola de apoyo para la petición que busca justicia.
La presión sobre Trump crece, y con ella, la urgencia de la situación. ¿Podrá el expresidente enfrentar el karma de sus propias políticas? La respuesta está en el aire, pero lo que es seguro es que la batalla por la inmigración ha tomado un giro inesperado y personal.